La preparación es muy fácil:
Primero se bate la mantequilla con el azúcar hasta que quede una pasta homogénea.
Luego se añade la harina, poco a poco, mientras se sigue batiendo.
Finalmente se añade el huevo ( o la parte de huevo batido que corresponda, el resto lo puedes reservar para barnizar las galletas) y se continúa batiendo hasta tener una masa blanda.
Se amasa un poco con las manos (es de las partes mas divertidas para los niños, pero requieren un poco más de atención si no quieres que la masa acabe por todas partes...no he conseguido sacar foto de este momento). Se pone en un cuenco, se tapa con film y se mete en la nevera unos 30 minutos.
Pasados los 30 minutos se pone un papel vegetal sobre una superficie lisa, se enharina un poco, se pone la masa y se pasa el rodillo (otro momentazo con niños) hasta obtener una masa de medio centímetro ( 5 mm) aproximadamente.
Se pone papel vegetal sobre la bandeja del horno. Y se pone a precalentar el horno a 180º. En esta receta todas las tallas usan horno. ¿qué es eso de las recetas por tallas?
Se van cortando las galletas con ayuda de un molde para galletas y se colocan en la bandeja. Cuando termines, con la ayuda de un pincel y cuidado para no salirte de la galleta, puedes pintar con huevo batido las galletas, del que habías reservado antes, te saldrán brillantes.
Mételas en el horno, que ya tenías encendido a 180 º, con la bandeja en posición media, unos 12 minutos o hasta que se doren.
Deja que se enfríen, y ya están listas!!!!
Puedes personalizar el gusto de tus galletas añadiendo antes de introducir la harina a la mezcla esencias, canela, jenjibre, ralladura de limón, naranja, cacao, frutos secos...al gusto
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